Cinnamon Lodge Habarana ★★★★★

La finca donde está ubicado el hotel es increíble. Se percibe que se trata de un hotel con historia. El personal perfecto. La piscina genial.

Las habitaciones necesitamos una actualización. Especialmente las camas.

Piscina muy bien. Desayuno perfecto

nada en particular

Todo estupendo, merece la pena

La naturaleza el entorno

Nada

El entorno, hay un lago por el que pasear con animales y total silencio. La habitación tenía un balcón muy mono y no se escuchaba nada del resto de huéspedes. La atención es muy buena desde el comienzo. Además del Buffett muy rico y con todo tipo de opciones.

Nos dieron una habitación en la que había que subir algunas escaleras y el baño tenía una ducha con poca presión.

La finca, antigua y con árboles grandes, a la orilla del lago es muy bonita. Estaba lleno de familias locales, parece un sitio ideal para ir con niños.

Camas de 90 centímetros, con colchones de muelles muy malos. Las almohadas malas también, de un tamaño anómalo (un palmo de espesor, imposible usarlas para dormir). Reservé una habitación con cama doble indicando que era mi luna de miel y pidiendo una ubicación tranquila. Me dieron una habitación que da al aparcamiento, con autobuses pasando bajo la ventana cuando llegamos, y dos camas de 90 cm. Al reclamar, nos dieron otra habitación. Al reclamar otra vez, y poner una review en Google Maps, la segunda noche nos juntaron las camas y pusieron sábanas de cama doble. Cada noche encontramos cucarachas en la habitación. Enormes. Es extraño porque era una habitación a 200 metros del edificio principal, donde está la cocina, almacenes, etc. Que un bungalow solitario en un jardín en mitad del campo tenga cucarachas adultas enormes indica que no se hace ninguna desinsectación, que es mal mantenimiento. No quiero ni imaginar lo que hay en las cocinas. En el checkout se disculparon y nos ofrecieron un descuento (que no te arregla las dos noches de luna de miel chungas entre cucarachas y mala cama). El descuento cuando lo vi casi me da la risa, 10€ de los 350€. Se esfuerzan mucho en ser amables y te saluda hasta el jardinero, pero el servicio objetivamente es lento y malo. Si teniendo mesas libres con sombra y ventilador en un mediodía tórrido te insisten 4 veces en sentarte a comer bajo el sol, por mucha sonrisa y dulces palabras con la que lo hagan, te parece mal. O si la cena tarda 45 minutos en llegar. O si cuesta un mundo que te traigan una almohada de tamaño estándar.

El baño La cama era comoda La piscina perfecta Y el desayuno estupendo

La habitacion no tenia suficiente luz y cuando se apagaban todas entraba claridad por una ventanita sin cortina Pomos de las puertas muy abajo Poca presion del agua

La piscina. Mucho personal a tu disposición y muy amable. Presencia constantes de monos en el recinto. Animales no agresivos ni problemáticos.

El baño huele un poco a tubería. Lentitud del servicio.

El hotel es como un oasis de lujo. Precioso, cuidadisimo, súper agradable... Nos quedamos enamorados, volveríamos sin dudarlo. Estuvimos 20 días de ruta por Sri Lanka y Tailandia, y este hotel fue el mejor con diferencia.

No nos queríamos ir!!

Una piscina muy bonita, la habitación muy amplia y un restaurante con comida ceilandesa

La primera noche encontramos una cucaracha en la habitación (aparte de hormigas que por el lugar podía ser normal). Pedimos al personal que echasen insecticida. No nos hicieron caso y la tercera noche volvimos a encontrar otra cucaracha en la habitación. Decidimos cancelar la última noche por la falta de limpieza

Personal súper agradable. Comida muy buena. Habitación muy amplia, cómoda y con todos los servicios.

Precios de los servicios adicionales (spa, excursiones)

La habitación muy bien! Amplia y cómoda! La ubicación era muy buena para ir de ruta a diferentes ciudades o visitas. El buffet muy bueno! Tanto para cenar como para desayunar. Además, está en una zona muy agradable al lado de la piscina.

El Wifi no iba demasiado bien, se cortaba bastante. Los precios de los servicios adicionales (excursiones, Spa, bebidas) un poco elevados. No hay casi nada alrededor.

Personal muy amable. Buena situación. Instalaciones maravillosas y muy bonitas. Habitación muy grande y limpia con una cama comodísima. Lo mejor el restaurante. Buffet muy variado y muy bueno tanto para cenar como para desayunar.

Precioso hotel en plena naturaleza, bien ubicado para hacer excursiones y con buenos servicios

La limpieza dejaba bastante que desear y por culpa de los niños no ventilaban las habitaciones

El entorno. Se puede montar en elefante a cinco minutos a pie del hotel.

El horario de las cenas es hasta las 22.00 mientras que en el resto de hoteles en los que estuvimos de Sri Lanka era 23.30. No lo sabíamos y el primer día llegamos justo a las 22.00 que estaban recogiendo todo. No obstante, nos prepararon una mesa enseguida y nos dijeron que cenáramos tranquilamente sin problemas aunque fuera tarde

Buena comida aunque en su mayoría picante Habitación muy cómoda y limpia El entorno increíble